jueves, 25 de marzo de 2010

Al manantial





Siento que no estoy,
que no me hallo entre la gente.
Que hablo, que digo, que me muevo
y que la vida continúa girando.
Escucho y callo, preguntándome
donde he pretendido encajar
si no soy capaz de ello.

Me aparto,
siendo consciente de mis actos,
buscando alejarme de lo que me violenta.
No hace falta agradar a nadie
porque al final, estaré yo sola
bailando con mis sentimientos.

Así puedo volver al bosque
y beber del manantial
todas las veces que haga falta
y limpiar el veneno que, en ocasiones,
me atrapa.



3 comentarios:

ideas dijo...

¡Qué importante es encontrar ese oasis en medio del mundanal ruido! ¡cuántas veces uno debe alejarse, parar para poder encontrarse y ver con claridad lo que tenemos en frente!

Trini Reina dijo...

Si te apartas para alejarte de lo que te violenta, me parece bien; pero no apartarnos por otros hechos.

Todos necesitamos ese manantial, ese espacio donde ir a sanarnos.

Besos

Ojo de fuego dijo...

ideas: Es bueno saber buscar esos rincones donde encontrarse verdaderamente, sin influencias externas. Y es algo que necesitamos, sin lugar a dudas.
Besos
........................
trini: Hace tiempo aprendí, que yo no podía cambiar a los demás, que la que tenía que cambiar era yo, para poder continuar hacia adelante. Lo que pasa es que a veces, la manera de comportarse de algunas personas me satura, me lleva a entender que, a pesar de comprender ciertas posturas, no es la manera en la que yo actuaría, ni hablaría. Y lo peor es que después nos metan a todos en el mismo saco. (Es un tema laboral, tenemos algunos problemas con la patronal). A pesar de apoyar las reivindicaciones, no puedo entrar en cierto juego de palabreo, de charla... Prefiero mantenerme al margen porque me enveneno, de verdad, Trini, me enveneno.

Muchos besos